Localización de plantas: La ubicación física de la organización es
un aspecto muy importante en la práctica administrativa, ya que ésta mantiene
una estrecha relación entre la productividad y el alto grado de eficiencia.
Para ser productivos y eficientes no basta con una estructura armónica, ni
sistemas y procedimientos de trabajo idóneos; es necesario estar ubicados
geográficamente en un lugar estratégico, considerando factores externos como:
accesibilidad, mano de obra disponible, consumidores, proveedores, condiciones
ambientales, entre otros. Factores éstos que van a determinar en gran proporción
su permanencia en el mercado competitivo.
La necesidad de examinar a fondo el conjunto de factores que influyen en la operación técnica y económica de una empresa en un determinado lugar es indispensable para el logro de los objetivos propuestos.
La necesidad de examinar a fondo el conjunto de factores que influyen en la operación técnica y económica de una empresa en un determinado lugar es indispensable para el logro de los objetivos propuestos.
Estudios de localización de plantas industriales y de servicios.
Las decisiones de localización intentan responder a la pregunta sobre
dónde deben estar ubicadas las instalaciones. Estas decisiones forman parte de
la estrategia de la empresa y son vitales para el logro de los objetivos de la
misma.
Las causas de los estudios de localización suelen ser las siguientes:
• La existencia de mercados en expansión.
• La introducción de nuevos productos o servicios.
• La contracción de la demanda.
• El agotamiento de las fuentes de abastecimiento.
• El cambio de la localización de la demanda.
• La obsolescencia de la planta.
• La presión de la competencia.
• Los cambios en el mercado de la mano de obra y /o de los proveedores.
• Los cambios en las condiciones socio políticas.
• Las fusiones y adquisiciones de empresas.
Los estudios y decisiones de localización son muy importantes; son
infrecuentes, sobre todo en la industria (en los servicios son más frecuentes);
significan la inmovilización de mucho capital a largo plazo, y son decisiones
que afectan la capacidad competitiva de toda la empresa, y a todas sus áreas.
Los objetivos de estos estudios y decisiones de localización en general
son:
• Elegir la localización que más favorezca el desarrollo de las
operaciones.
• Optimizar los costos de las instalaciones y transportes de modo que se
obtenga un costo total mínimo.
• Elegir la localización más concordante con la estrategia general de la
empresa, y en especial con las decisiones sobre producto y proceso.
En general, ya sea por medio de análisis cuantitativos, o por métodos
heurísticos, o mediante simulaciones, los procedimientos para llevar a cabo un
estudio de localización siguen los siguientes pasos básicos:
• Análisis preliminar: Traducir la estrategia general de la empresa en
requerimientos de localización.
• Búsqueda de alternativas de localización: Estudio y relevamiento del
conjunto de los lugares candidatos, y ordenamiento de sus datos.
• Evaluación de alternativas: Análisis detallado, comparado, cuanti y
cualitativo de los lugares candidatos, agrupamiento y primer descarte.
• Selección de la localización: Segundo descarte y elección de los
lugares más aceptables, hasta llegar a una terna y la posterior decisión final.
Los criterios más generales u opciones básicas suelen tomar alguna o
algunas de las siguientes orientaciones:
• Orientación a los insumos.
• Orientación al proceso.
• Orientación al producto.
• Orientación al mercado.
• Formas combinadas
Yendo ahora a una consideración más detallada de los factores que
afectan a los estudios de localización en el caso de plantas industriales,
encontramos los siguientes:
• Fuentes de abastecimiento: Seguridad de abastecimiento, modos de
transporte de insumos y exumos, especial consideración a los insumos
perecederos.
• Mercados: Acceso fácil de los clientes, localización de la
competencia, costos y disponibilidad de transportes, especial consideración a
los productos perecederos o frágiles.
• Medios de transporte y de comunicación: Disponibilidad de transportes
marítimos, fluviales, carreteros, FFCC, aéreos. Capacidad de carga,
versatilidad, seguridad, tiempo, articulación, costos. Medios de comunicación
disponibles, seguridad operativa, costos.
• Mano de obra: Disponibilidad de efectivos. Capacidades y habilidades.
Nivel promedio de salarios y otras prestaciones. Nivel de sindicalización.
Nivel de ausentismo y actitud cultural ante el trabajo.
• Suministros básicos: Disponibilidad y costos de las fuentes de energía.
Disponibilidad y costos del aprovisionamiento de agua.
• Calidad de vida: Capacidad de la zona para atraer la radicación de
directivos, técnicos, mano de obra calificada, etc.
• Condiciones climáticas: Datos del clima que afectan al proceso productivo.
Incrementos de costo por incidencia de factores climáticos: calefacción,
refrigeración, filtrado de aire, etc.
• Marco jurídico y administrativo: Normativa local, regional, nacional,
favorable o desfavorable. Legislación laboral, sindical, medioambiental. Nivel
de burocratización administrativa, nivel de corrupción etc.
• Impuestos y servicios públicos: Presión fiscal nacional y local.
Incentivos tributarios. Calidad, disponibilidad y costo de los servicios
públicos.
• Actitud hacia la empresa: De las autoridades y de la opinión pública.
• Terrenos y construcción: Topografía y capacidad portante de los
terrenos, ubicación y costo. Posibilidades técnicas de construcción. Edificios
existentes.
• Otros factores: Lengua y cultura. Estabilidad política y social.
Moneda. Trabas aduaneras. Posibilidad de envío de ganancias al exterior.
Este cuadro general de factores está afectado por nuevas tendencias
actuales, tales como la internacionalización de la economía, la automatización
y flexibilización de los procesos, las mejoras en los transportes, el
desarrollo informático y de las comunicaciones, la adopción generalizada de
sistemas JustoaTiempo, el éxodo desde áreas urbanas centrales a áreas
suburbanas y rurales, etc.
La realización de estudios de localización de empresas de servicios
comparte muchos de los criterios expuestos hasta aquí pero tiene también varias
peculiaridades, por lo que es oportuno mencionar ahora los siguientes rasgos:
• En general el usuario de servicios acude a las localizaciones más
próximas .
• Las implantaciones de servicios suelen cubrir un área geográfica
relativamente más restringida que las industrias.
• Las implantaciones de servicios suelen ser más numerosas, pequeñas y
menos costosas.
• Es muy frecuente la necesidad de tomar decisiones sobre localización
de servicios, mucho más frecuente que en la industria.
• En la localización de empresas de servicios los factores dominantes
suelen ser el mercado y la demanda, no el aprovisionamiento ni los costes.
• Con respecto a la mencionada proximidad de los clientes, hay varios
casos especiales: 1) El cliente va a la empresa por el poder de atracción de la
implantación; 2) El servicio va al cliente, por lo que la localización es una
base de operaciones. 3) El prestigio del servicio hace que al cliente no le
importe hacer un largo recorrido. 4) El servicio llega al cliente por otras
vías: teléfono, Internet, catálogo, etc.
• Con respecto a la proximidad de la competencia, hay dos estrategias
posibles: 1) Evitar las zonas saturadas. 2) Aprovechar la sinergía de las zonas
saturadas mediante diferenciación.
• Puede aprovecharse también la proximidad de posibles aliados: la
presencia de establecimientos afines o complementarios, con los que puede
plantearse una relación simbiótica o parasitaria.
• La localización de comercios minoristas generalmente consideran los
siguientes factores: el tamaño de la instalación; el tiempo para llegar a la
misma; el numero total de consumidores potenciales del sector; el nivel de
precios del sector; la variedad de productos en el sector; la disponibilidad de
estacionamientos; el nivel de congestión del tránsito.
• Con respecto a la localización de servicios públicos es de hacer notar
una interesante diferenciación: en los servicios comunes, hay que tener en
cuenta el nivel de utilización, las distancias recorridas, el tiempo de viaje y
el tiempo de espera, mientras que en los servicios de emergencia hay que tomar
en cuenta el tiempo de respuesta a la demanda y considerar siempre el peor de
los casos y no el promedio.